El posicionamiento SEO es ese misterioso elemento de nuestras vidas que causa tanta fascinación como preocupación: “¿lo estaré haciendo bien?”, “¿si esto es el SEO, qué es el SEM?”, “¿esto es contenido duplicado? ¿me pueden penalizar por ello?”
Si la última duda es la que más te atemoriza, quédate a leer este artículo, que te va a venir muy bien.
Ante todo, debemos aclarar las diferencias entre tres conceptos que se confunden con mucha facilidad: contenido duplicado, contenido copiado y contenido repetitivo. Teniendo claro qué significa cada uno, tus miedos a la penalización se evaporarán.
- Contenido duplicado: Se refiere al contenido que es exactamente igual, o muy similar, a otro que tengamos en nuestra página web. Un ejemplo de esto son las versiones móviles de nuestra página; la web que se muestre en el dispositivo será una adaptación de la versión para escritorio, pero con el mismo contenido exactamente.
Aunque no vas a recibir ninguna penalización por el contenido duplicado, tiene sus pegas. Google no sabrá cuál de las dos páginas debe posicionar y ambas entrarán en competición.
Para solucionar este problema podemos hacer dos cosas:
- Si no queremos que la página sea mostrada, podemos hacer una redirección 301 a la página que sí queremos que se muestre. Esta opción es muy común para las páginas que crean los CMS de forma automática.
- Si queremos que la página sea mostrada podemos utilizar una etiqueta Canonical para indicar al buscador que ese contenido es una versión de otra página.
Si te interesa saber más sobre este tema, no dudes en preguntarnos y te ayudaremos a solucionar el “problema” del contenido duplicado.
- Contenido copiado: Este se refiere a contenido que cogemos de otra web y lo plagiamos en nuestra web. Google quiere que los contenidos de cada página sean únicos y que nadie se aproveche del contenido de nadie. Por tanto, el contenido copiado SÍ es penalizable. La mejor solución es reescribir el texto, convertir el contenido copiado en algo original y único; se puede contar lo mismo dándole un enfoque distinto.
En el caso de que ya hayamos sido penalizados por esto, si no somos reincidentes, podemos pedir a Google que reconsidere su castigo una vez hayamos subsanado el problema del plagio.
- Contenido repetitivo: Este contenido es, simplemente, el que se muestra en todas las páginas de nuestra web; siempre es el mismo. Es el caso de las páginas 404 que muestran un estado 200 en lugar de un estado 404, todas las partes de navegación como los menús, submenús o el footer. Tampoco este contenido penaliza, pero no aporta valor a nuestra web, así que Google no lo tendrá en cuenta. No es malo, pero es mejor evitarlo en la medida de lo posible.
Teniendo claros los diferentes tipos de contenido y sabiendo cómo subsanar los problemas que se nos presenten por ellos, nuestro posicionamiento SEO puede convertirse en algo que a Google le encantará exhibir por todo lo alto, literalmente.
¿Te ha quedado alguna duda por resolver? ¡Cuéntanoslo y te la responderemos encantados!